¿Cuántas veces has dicho ‘solo voy a poner una canción para motivarme’ y terminas con los audífonos puestos toda la tarde? Ya sea para estudiar, limpiar, entrenar o hasta dormir, porque hasta en ese momento la escuchamos y tiene efectos. La música se ha vuelto parte esencial de nuestro día a día. Pero ¿por qué sentimos que no podemos hacer ‘nada’ sin ella?
¿Por qué hago todo con música?
La respuesta tiene que ver con cómo funciona nuestro cerebro. Resulta que cuando escuchamos música que nos gusta, se activa el sistema de recompensa del cerebro, ese mismo que responde cuando comemos algo rico o recibimos un cumplido. La dopamina (esa hormona que nos hace sentir bien) se libera, y ¡pum!, de pronto fregar los platos ya no se siente tan mal.
Además, la música ayuda a bloquear distracciones. Es como ponerle “filtro” al ruido del mundo. Si estás en un lugar lleno de gente, con la playlist adecuada puedes crear tu propia burbuja y concentrarte mejor. Es por eso que muchos no pueden estudiar sin música, pues ayuda a entrar en ese "modo enfoque".
Y claro, también está el factor emocional. Hay canciones que parecen leer nuestra mente. Nos hacen sentir entendidos, acompañados o incluso más poderosos. Así que no es raro que busquemos música según nuestro estado de ánimo o lo que queremos sentir. Es como una herramienta emocional al alcance de un clic.
¿La música ayuda a la salud?
- Hace que 'desaparezca' el dolor
Hay estudios donde se demuestra que algunas personas hace sentirlas mejor sobre alguna molestia y, en algunos casos, hace que desaparezca el dolor.
- Crea vínculos y conexiones
Puede que no te estés dando cuenta, pero tanto como para un niño o para una persona adulta, la música hace una función muy importante para crear lazos sociales. Incluso te recomendamos que aprendas a escuchar la música de tu hijo o hija (en caso de que tengas), ahí podrías darte cuenta de cómo se siente.
- Reduce la ansiedad y estrés
Así es, la música relaja, sirve para neutralizar ciertos comportamientos que tiene en que ver con la reducción de estrés y la ansiedad a procesos que normalmente te lo generan, como un examen, ir al dentista, al médico o incluso a algún miedo.
- Ayuda a tener mejor memoria
Te puede sonar raro, peor la música juega un papel para tu memoria. Algunas investigaciones demostraron que el ritmo y las melodías ayudan a crear patrones específicos en nuestro cerebro y esto ayuda a la memoria. Ayudamos de alguna manera a recordar y dar atención.
- Genera actitudes positivas
Escuchar tu canción favorita o una canción que tenga un ritmo que te guste liberará sin querer endorfinas, esas sustancias que nos hacen sentir felices.
Entonces, no, no estás loco por no poder hacer nada sin música. Más bien, estás aprovechando una herramienta poderosa que tu cerebro ama. Eso sí, de vez en cuando también está bien disfrutar del silencio... pero bueno, una playlist primero y luego vemos.