El tiempo de sueño es una parte clave para poder descansar y tener una vida plena. Junto con una dieta equilibrada y actividad física periódica es posible tener un estado de salud óptimo. Un buen descanso ayuda a disminuir el riesgo de enfermedades cardiovasculares o accidentes cerebrovasculares.
Obviamente no es lo mismo el tiempo que duerme un niño que un adolescente, un adulto o un anciano. Algunas personas necesitan dormir más, según la franja etaria que ocupan. Más allá de esto, hay una clave que se debe tener en cuenta para poder dormir toda la noche y descansar al máximo.
¿Cuál es la hora exacta para dormir?
Según el doctor Andrew Huberman, de la Universidad de Stanford, hay una hora exacta en la cual contraer el sueño: la hora en la que estamos cansados. O sea, hay que conocer el momento basándonos en una disminución del rendimiento de nuestras facultades.
El profesional ejemplificó con el sentirnos cansados después de haber comido. "Si en el sueño nocturno no hay cambios sustanciales, o salvo que consumas un almuerzo especialmente grande, existen muchas probabilidades de que tu hora ideal para acostarte sea de seis a siete horas tras esa comida", dijo el experto en el acto de dormir.
Por otra parte, Max Kirsten, el experto en sueño de la clínica Wellbeing, dijo: "Lo ideal es acostarse entre siete y ocho horas antes de levantarse por la mañana, y a la misma hora todas las noches, ya que la regularidad es fundamental. Como no todos somos iguales, nuestras necesidades de sueño variarán en función de nuestro cronotipo de sueño", aseguró.
"Aprende a escuchar a tu cuerpo. El sueño natural ocurre sin estimulantes. El alcohol, la cafeína, la luz azul de la electrónica y las pantallas por la noche erosionan la calidad del sueño", añadió el experto en sueño. Según un estudio de The Sleep Council,la franja ideal para dormir se debe situar entre las 22:00 y las 23:00.
"Es el momento en el que la temperatura de nuestro cuerpo disminuye, así como los niveles de cortisol (la hormona del estrés). Según se va haciendo de noche, el cerebro comienza a producir melatonina, que es precisamente la sustancia que necesitamos para que comience a entrarnos sueño", explicaron.